sábado, julio 12, 2008

Hijos de la Medianoche

Me voy entarndo que el libro 'Los Hijos de la Medianoche' (Midnight Children) de Salman Rushdie recibió recientemente el premio 'The Best of Booker', durante la celebración del 40 aniversario del premio Booker. Cabe mencionar que este libro ya había ganado otros 2 premios Booker anteriormente. El primero lo recibió el año de su publicación, en 1981. El segundo, ya en 1993, lo recibió al ser considerado 'The Booker of Bookers', durante la celebración del 25 aniversario del premio.


Hijos de la Medianoche


Yo leí por primera vez 'Los Hijos de la Medianoche' allá por el 2001. Por azares del destino, por ese tiempo me encontraba yo viviendo en Estados Unidos. Acaba de pasar el famoso 9/11, por lo que en ese país se vivían tiempos inciertos. Durante esas épocas no tenía muchos amigos, por lo que la lectura se convirtió en uno de mis refugios favoritos.

Recuerdo el día que compré el libro. Recién acababa de descubrir que relativamente cerca de donde vivía había una librería enorme, llamada Barnes and Nobles, donde solía pasar interminables horas, particularmente los sábados por la tarde. Me encontraba entonces ahí, buscando alguna lectura nueva, cuando me encontré con varios libros de Salman Rushdie. No conocía mucho de ese autor, pero su ascendencia Indio/Inglesa, además de la infame fatwa que existía contra él me hicieron comprar el libro.

Llegué a casa y lo empecé a leer. Desde la primera página me capturó por completo. Fueron muchos los detalles que me llevaron a adentrarme en él, casi al grado de la obsesión. Es un libro complicado de leer, pero aún así no podía evitar las noches de desvelo con tal de saber que sucedía con Baba Saleem, y a la par, lo que sucedía con esa India post-colonial.

Algo que me llamó mucho la atención fue que, a final de cuentas, este libro tenía mucho de realismo mágico. Escrito muchos años después de que esa corriente naciera en América Latina, yo lo podía ver como un gemelo espiritual de 'Cien Años de Soledad' (sí, así de bueno es). Es curioso como la sociedad mexicana (latinoamericana en general) y la india se parecen tanto (tienen un 'aire de familia' diría Monsivaís). Yo se lo atribuyo a que el clima es similar, a que la posición geográfico-tropical es muy parecida, y a qué más o menos hemos pasado por lo mismo (colonialismo, influencia exterior, muchos problemas interiores). Múltiples pláticas con taxistas indios y una visita a Agra y Nueva Delhi me confirmaron ese parecido años después.

Pero bueno, retomando a los nocturnos chamacos. Un día en la noche llegué al final del libro, y sucedió lo impensable. Conforme leía el triste final (el cual no mencionaré para no arruinarle el libro a algún interesado), lágrimas empezaron a surcar mis mejillas. Fue tal mi identificación hacia la historia, tal mi apego al personaje principal, que de alguna forma, su destino me afectó más de la cuenta.

A la fecha para mí es muy complicado enteder que fue lo que pasó. Realmente no comprendo como es que la historia de un niño indio que nació a la par de su patria pudo estremeserme a ese grado. Pero no me molesta, cada que lo veo en el librero, o leo una noticia alrededor, recuerdo ese momento, y me llena de una cierta alegría (que bien puede ser nostalgia).

Léanlo, se los recomiendo.

PD. Y sí, este post lo escribí ya pasada la medianoche. No se me hubiera hecho apropiado a ninguna otra hora.

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